Hadas Góticas

En las tinieblas de la noche las hadas góticas aparecen, vienen por el Samhain, es cuando más suelen verse, cuando el verano nos deja y aparece el invierno.  Son parecidas a las hadas del verano, solo que sus ropas son diferentes, más oscuras,

su apariencia más siniestra y malvada, pues son mucho más traviesas y se vengan de las personas que no son gratas para ellas, así mejor si las ves, sal de ese lugar donde las has visto lo antes posible, pero sin correr, tranquilamente con calma y amor.

Son mucho más recelosas, porque están algo más resentidas, estás hadas se mueven en la noche más oscura, entre la maleza, en las sombras, sobretodo en la niebla, para no ser vistas nunca, así que cuesta mucho más de verlas, mucho mejor no encontrarse con ninguna de ellas.

Aunque a veces no son tan malas como parecen y tienen benevolencia pero no todas, normalmente secuestran a los humanos para hacerlos sus esclavos, algunos no vuelven jamás,

se quedan para siempre en el Mundo Oscuro. Las Hadas están entre las que conocemos alegres, risueñas y dispuestas, ayudar a los demás, y las brujas que siempre andan con conjuros, maldiciones o ritos embocando al mismo diablo.

Por ello estás hadas Góticas tienen los dones de las hadas y la magia y conocimientos de las Brujas. Todas ellas son hermanas pero no se llevan muy bien, procuran estar  alejadas las unas de las otras.

haciendo su vida por separado. Por eso las hadas de las flores, acuáticas, y las de los bosques podemos verlas mejor en verano,

a las góticas o siniestras nos las podemos encontrar en invierno. Otra de las terribles costumbres de estás hadas era realizar disparos de elfo a determinadas personas o al ganado.

Eran puntas de flecha del sílex, y la persona o bestia disparada desarrollaba alguna enfermedad. Un determinado tipo de hada, conocida como “devoradora de articulaciones”,

podía pegarse a un persona y absorber todos los nutrientes de los alimentos que tomaba, de modo que el humano estaba hambriento y desnutrido. Las hadas relacionadas con la maldad son demasiado numerosas para enumerarlas, y adquieren diferentes formas para dejarse ver, como caballos que matan a quiénes los montan,

o destrozan el cultivo y las tierras de los campesinos que las trabajan. Ciertas hadas pueden ser viciosas y malas; de hecho, todas pueden ser tramposas. Las “hadas del terror”, pueden asaltar a cualquiera que este solo en la naturaleza.

En la época pagana los espíritus de la naturaleza eran honrados, pero con la llegada del cristianismo los dioses de las antiguas religiones se transformaron en demonios de la nueva, dejando a las hadas en una especie de limbo pagano. Es muy triste, pues las hadas adoran la Tierra.